jueves, 1 de diciembre de 2011

Que gane el quiero la guerra al pueblo.

Cuando el dia no te alcance, es tiempo de abrir los ojos.
Quizas estes haciendo mas las cosas que debes que las que querés. Es raro como poco a poco, cuando eramos niños, los días eran interminables, las vacaciones infinitas y el día de cumpleaños no llegaba nunca.
Los años fueron pasando, y el tiempo que parecía siempre el mismo, inconscientemente se iba acortando.
Terminaba la mágica secundaria y todo caia en un torbellino sin fin, de prisas, de responsabilidades, de anhelos, donde cada dia deja de ser dia, para ser un numero sin fin de tareas en una agenda.
Sin darnos cuenta, las vacaciones son solo un suspiro, no terminamos de despedir cumpleaños para darnos cuenta que estamos cumpliendo otro. Toda una carrera, por ser mas capaces, mas instruidos, mas de todo.
Realmente poco sirve llegar al final del camino, sin disfrutar cada día, cada paso en este recorrido.
Que pasaría si sin darte cuenta, has llegado a tu meta, y has olvidado la belleza del sendero que siempre fue tu compañero.
El deber, terrible palabra, que nos encadena a una ilusión, que mas que ilusion es lastre para nuestras alas. Uno deberia siempre tratar de hacer aquello que ama.
No puede haber mas deber que el mismo querer ser.
Un dia Un día la inagotable fortaleza de la juventud se habrá ido con las hojas de la primavera de la vida. ¿Estas realmente disfrutando el gigantesco poder de la belleza de la juventud?
Un dia la energia de los años ira cayendo como el sol de una tarde de verano. ¿Te anismaste a recorrer todos esos kilometros que siempre has deseado?
El corazón que regala en cada latido una nueva oportunidad, no se alimenta de los debo, se alimenta de sueños. Y los sueños cobran vida en el quiero, en el siento. Lo imposible solamente requiere de mas tiempo escuche alguna vez. Es increible los caminos que podes abrir con intentar tan solo una vez, hacer las cosas de una manera distinta. Animate porque cuando un corazón se incendia de pasión, una nueva estrella brilla en los cielos. Y no existe en el mundo algo mas hermoso que un cielo regado de estrellas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Sabias y hermosas palabras... Nada más que decir.